lunes, 3 de diciembre de 2007


Luz de domingo
Lo moderno no es cine


Comienzo mi opinión sobre esta película así debido a que en las últimas obras de Garci siempre te da la sensación de que estás viendo un clásico de los 60. Cine antiguo pero sin duda el director, no olvidemos que también es guionista y productor, lo hace a conciencia. Me imagino que esta afirmación, la del inicio la podría hacer Garci sin complejos. Siempre pienso que con todo el esfuerzo que hay que realizar en una película y la cantidad de creativos que trabajan para un sólo objetivo nada debe de hacerse de improviso. Con Garci tengo esa misma sensación pero multiplicada por muchas cifras. Desde luego, él realiza sus películas como quiere. Hay muchos directores que no pueden decir lo mismo. De eso no hay duda desgraciadamente. Parece que para él el cine actual no es cine. Es otra cosa. Parece que todo debe de ser artificioso (lo digo en el buen sentido). Con esos efectos sala excesivos y con esos encadenados en total desuso en el cine actual. No estás viendo realidad estás viendo ficción. Para Garci eso es el verdadero cine. Es discutible pero en este film consigue hacer su cine aunque con un texto anticuado y rodeado de toda esa artifiosidad voluntaria. El problema es cuando en ciertos momentos se le ha querido dar a la trama cierta actualidad que el texto no tiene. Y sorprende en ciertos momentos como un director con tanta experiencia y con tanto control en el acabado de su obra consienta que en unos de los planos finales el guardia civil arrodillado le diga de esa forma lo que le dice a Alfredo Landa o como puede contemplar un final tan recargado con las imágenes de su amado Nueva York con esa ponposidad. Entiendo que Urbano es aficionado a la pintura pero en ningún momento dicha característica del personaje protagonista influye en el resto de la cinta. A pesar de todo ello lo que no se puede discutir es que los actores están muy bien. Y técnicamente es un producto muy bien acabado con una excelente fotografía, un buen vestuario, una buena ambientación también en la música y un excepcional trabajo con los decorados de Gil Parrondo. Como el director dice ¨No sé si alguna vez conseguiré hacer una obra maestra¨ desde luego, a mi juicio, esta no lo es.